J. M. G. Le Clézio ha abierto su caja negra para revelarnos qué le impulsó a escribir. Primero, la imagen de los muros sobre el Mediterráneo que los alemanes levantaron en Niza para impedir a la población el acceso al mar y, después, la guerra, el hambre y las enfermedades propiciaron una singular sensibilidad para captar todo lo que ocurría. Entonces llegó su primera novela, escrita cuando tenía solo diez años: contaba la historia de un niño africano que dejaba Europa. Por entonces Le Clézio vivía en Nigeria, donde su familia se había reunido con el padre, al que él no conocía y que le ayudó a descubrir un nuevo continente, así como un nuevo destino.
Conviviendo con niños africanos, en una naturaleza diferente, rica y frágil, forjó su gusto por la libertad y comenzó a perfilar una particular relación con el mundo, una mirada dirigida a los desfavorecidos y un deseo de que la escritura se transforme en acción. Una «identidad nómada», en suma, sobre la que el Premio Nobel de Literatura se sincera en estas páginas de gran intensidad, íntimas y esenciales.
Mario, un joven funcionario, es la personificación de la rutina. Frente a él, su esposa Blanca, culta y exquisita, encarna el lado brillante de la vida. Mario le roba horas al trabajo para estar con ella hasta convertirla en su obsesión y hacer de su vida un temor permanente a la pérdida, al abandono, a la rotura del hechizo que retiene junto a él a una mujer que no cree merecer. Cuando Blanca, buscando nuevos horizontes, se va de casa para regresar tiempo después, Mario no sabe hasta qué punto es la misma persona que cree conocer.
En ausencia de Blanca es una exploración lírica y conmovedora sobre el amor, la intimidad y la incomunicación en el seno de un matrimonio desigual, visto a través de los ojos de un hombre confundido. Una novela elegante y emotiva que plantea hasta qué punto nos enamoramos de una persona real o de la imagen que hemos inventado de ella.
Publicado originalmente como relato en 1996 y, posteriormente, como novela en 1999, en este libro Antonio Muñoz Molina muestra su maestría para ahondar en la psicología y en la intimidad de una pareja. «Un escritor necesario […]. Si no existiera, nuestro panorama intelectual sería mucho más pobre. Su lectura nunca es tiempo perdido», Santos Sanz Villanueva, El Mundo.
Tras regresar a su ciudad natal, un Madrid desdibujado y sórdido, el protagonista de El dueño del secreto se ve implicado por una serie de casualidades en una supuesta conspiración contra el dictador, atrapado por la maquinaria de una conjura para cambiar el destino de España. Los recuerdos de su juventud se mezclan con la realidad de unos años turbulentos, en los que toda una generación se movía en un entorno de incertidumbre política y esperanza renovada.
El dueño del secreto es una novela fascinante que refleja las tensiones y cambios sociales que siguieron a la muerte Franco en 1975 y es también una acertada reflexión sobre la memoria, tanto individual como colectiva, y sobre cómo los eventos históricos moldean la vida de las personas.
Seis mujeres, vecinas de un mismo bloque, están a la espera de algo. Cada una aguarda cosas distintas, pero para todas se trata de una espera relacionada con lo sentimental. En el 1.° B vive desde hace dos semanas Amelia, una periodista de veintinueve años con trabajo y pareja. Su vida da un giro radical cuando la despiden y su novio decide irse a trabajar una temporada a Washington. En plena crisis vital, Amelia conoce a sus nuevas vecinas. Juntas ponen en marcha una tertulia de radio en la azotea del edificio para contarse su día a día al tiempo que intentan ayudar a Agustina, la mayor de todas ellas, a recuperar su casa de toda la vida.
Tristan Caine, el Cazador, no estaba preparado para la llegada de Morana Vitalio. Tras romper una promesa que llevaba defendiendo años, dentro de él se origina una batalla encarnizada entre su futuro y su pasado. La única certeza que tiene es que la vida de Morana aún le pertenece.
A Morana Vitalio, la línea entre enemigos y aliados cada vez le parece más difusa. Su mundo se ha desintegrado ante sus ojos y, ahora, se enfrenta al vacío de lo desconocido en territorio hostil. La única certeza que tiene es que ella es la dueña de su propia vida.
Unidos por un enigma de hace más de veinte años, Tristan y Morana buscan juntos la verdad. Sin embargo, el misterio de las niñas desaparecidas es solo la punta de un gran iceberg.
Quedan muchos esqueletos por desenterrar.
Y se acerca la tormenta.
Es muy temprano. La luz del alba trata de abrirse paso en el muro de niebla. A pie del monte, seis cazadores hacen los preparativos para la batida. Los une una mezcla de amistad, ansias de poder, conexiones profesionales e intereses económicos. Su objetivo: un jabalí, el Solitario, que arrastra una leyenda de criminal. Dombodán, el más joven de la cuadrilla un personaje especial, desquiciado y lúcido a la vez , narra, según se suceden, los episodios de una jornada que se va cargando poco a poco de tensión, violencia y frustración. Y a medida que habla, el joven desvela el abuso y la depredación social y natural que lleva imperando desde hace años en Tras do Ceo. En realidad, el mismo mundo en el que vivimos todos.