El 14 de febrero de 1942, el Vyner Brooke, un barco mercante que transportaba a un grupo desesperado de expatriados que huían de Singapur fue hundido por bombarderos japoneses. Aunque muchos de los pasajeros se ahogaron de inmediato, Nesta, enfermera australiana y Norah sobrevivieron milagrosamente pero fueron tomadas como prisioneras de guerra y trasladadas a campos.
Durante casi cuatro años, junto con cientos de mujeres y niños, lucharon por sobrevivir, contra enfermedades, el hambre y la brutalidad impensable infligida por los soldados japoneses y consiguieron encontrar, en sí mismas y juntas, un coraje e ingenio extraordinarios.
Un anciano se sienta en una habitación, con una única puerta y ventana, una cama, un escritorio y una silla. Cada día despierta sin memoria, sin saber si está encerrado o no. Sobre el escritorio, unas inquietantes fotografías y un manuscrito, la historia de otro prisionero en un mundo alternativo que no reconoce. Anna, una mujer de mediana edad, entra para hablarle de pastillas y tratamiento, pero también de amor y promesas. ¿Quién es este Míster Blank y cuál es su destino? ¿Tendrá tiempo suficiente para dar sentido a las pistas que surgen?
La excéntrica editorial del señor Bennet publica clásicos que nunca pasarán de moda y autores que, probablemente, nunca lleguen a estarlo. Tal vez por eso, su oficina no se encuentra en un moderno edificio empresarial sino en una destartalada y centenaria mansión en el centro de Barcelona.
Cuando Bruno Bennet propone a su desmotivada sobrina Beatriz que se haga cargo del negocio mientras él se ausenta para viajar en busca de un valioso manuscrito, ella imagina que trabajar entre libros será como un sueño hecho realidad. Lo que no imagina es que deberá lidiar con un traductor con modales de lord inglés, con una pila de manuscritos infinita y con cinco autores muy especiales a los que tendrá que perseguir para que entreguen su novela.
«Todo el mundo quiere nombrar su agujero, lo que nunca se colma, para sentir que está lleno de algo».
Violeta trata de aplacar el vacío que arrastra desde que nació, un hueco inexplicable que intenta saciar con el amor de otros. El amor arrollador y evanescente de Paul, alma gemela pero también condena. El amor seguro y colonizador de Salma, rotunda, fuerte y hermosa como la reina de un pueblo guerrero. El amor extraviado de un padre que se alejó pronto y el de una madre que asfixia como solo puede asfixiar el lugar del que una proviene. Violeta lleva una vida entera persiguiendo un ideal romántico y, sin embargo, siempre hay algo que no está, que no tiene; siempre hay algo nuevo listo para ser deseado.
Todos los días deberían ser el día de la Madre. Celebremos con este entrañable pequeño libro a esa persona que siempre ha estado, siempre está y siempre estará con nosotros.
Como dice 72 Kilos:
«Este libro es para todas las madres del universo, que son el origen de todo».
¡El mejor regalo para la mejor persona del mundo!
Ser hija es andar en sentido contrario; es huir en dirección contraria al destino sin saber que con nuestra huida estamos dando cumplimiento al vaticinio. La protagonista de esta novela regresa a casa después de mucho tiempo y descubre que su madre ya no volvió en sí tras una cirugía. Ante la imposibilidad de una reconciliación, debe confrontar consigo misma los silencios que se tejieron entre ambas y restaurar por medio de la escritura el vínculo deteriorado por sus ausencias. Este relato íntimo y conmovedor analiza con profundidad la compleja relación de una hija con su madre, el amor, los desencuentros y las tensiones que desbordan el lenguaje. Un auténtico viaje al interior de la ballena mítica que, como en el relato de Jonás, devora a la protagonista en su huida para llevarla a los abismos de la muerte, el duelo y el desasosiego, donde se pone de manifiesto que en ocasiones es necesario desobedecer los mandatos para elegir un camino distinto al establecido.