A caballo entre los siglos XIX y XX aparecieron en el continente americano poetas que se independizaron de la tradición poética de sus metrópolis, ya fuera de España o de Inglaterra. Empezaron a escribir versos de vanguardia, nunca antes vistos, que con el paso de los años llegaron a influir decisivamente en los poetas de sus culturas de origen. No todos los países de América contaron con estas figuras precursoras que al mismo tiempo que rompían con una tradición de poesía clásica instauraban una tradición nacional innovadora.
Precursores de América ofrece una radiografía de este momento de cambio a través de cinco poetas extraordinarios de distintas áreas geográficas del continente, que desbordaron los cauces de las tendencias importadas de Europa y que todavía hoy siguen influyendo en la poesía: Walt Whitman por Norteamérica, José Martí por el Caribe, Rubén Darío por Centroamérica, Gabriela Mistral por el Cono Sur y César Vallejo por la zona andina.
Esta antología ofrece una amplia muestra de cada uno de ellos, autores ineludibles para todos los lectores de poesía.
«Cincuenta y un años. Tres veces diecisiete. Tres posibles vidas diferentes si hubiera podido elegir. Aunque nunca elegimos ni decidimos nada, nos adaptamos a lo que se nos presenta. Y con el tiempo nos damos cuenta e interpretamos el mapa una vez que entendemos que “usted está aquí”».
Bob Pop vuelve a la narrativa con su diario más personal. El autor firma aquí una defensa feroz de la memoria y del derecho a la posteridad. Un relato tan crudo como lleno de estallidos de esplendor acerca de la vida real, el dolor físico y emocional y de una insaciable curiosidad intelectual. Dice el diario El País que «Roberto Enríquez, el hombre que hay tras Bob Pop, es un ejemplo perfecto de que eso que llamamos identidad está hecho de lo que hemos leído, de las pelis que hemos visto o de las canciones que hemos oído en bucle en la misma medida que de las muescas que nos dejaron los que nos amaron y los que no». Estos diarios llegan para confirmarlo, compuestos de lecturas, reflexiones, películas, trabajo, dinero, sexo y enfermedad. Un emotivo homenaje, también, a todos los creadores que le han inspirado.
UNA MISIÓN: LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL.
CUANDO UNO SE ACERCA DEMASIADO AL FUEGO, TERMINA QUEMANDOSE…
PARA ESTUDIAR EL PASADO, HAY QUE VIVIRLO.
En la Inglaterra de 2060, unos estudiantes se preparan para sus nuevos proyectos. Michael Davies va a estudiar Pearl Harbor, Merope Ward observará a los niños evacuados de Londres y Polly Churchill investigará los bombardeos desde unos grandes almacenes. Su misión: observar, desde un lugar seguro, la vida cotidiana en ese gran momento histórico. Al menos, en teoría.
Esta es una gran oportunidad para ellos, excepto cuando la Historia misma comienza a descarrilar. Y los historiadores, a medida que el tiempo corre, atrapados en los eventos caóticos que conforman la historia, se ven obligados a participar en ellos.
UN TREPIDANTE VIAJE EN EL TIEMPO.
UN POSIBLE CAMBIO EN LA HISTORIA YA ESCRITA.
EL MISMO CURSO DEL TIEMPO ESTA EN PELIGRO.
Londres, 29 de diciembre de 1940: una de las noches más mortíferas del Blitz. Atrapados en el corazón de uno de los peores bombardeos de la epoca, Michael, Merope y Polly buscan desesperada e infructuosamente regresar a la seguridad del siglo XXI.
La creencia de que la historia no se puede cambiar está fallando. Parece que todos los historiadores afectaron, de algún modo, el pasado, y sus intervenciones han modificado los acontecimientos cambiando el resultado de la guerra y, en consecuencia, el de la historia. Independientemente de la magnitud de los sacrificios requeridos, los historiadores deben comprometerse en una lucha frenetica contra el tiempo…
DOS ENFERMEDADES MORTALES.
DOS ÉPOCAS DIFERENTES.
UN MISMO DESTINO: EL FIN DEL MUNDO SE ACERCA...
Para Kivrin, estudiante de Historia de la Universidad de Oxford, viajar a la Inglaterra del siglo XIV es un sueño hecho realidad. Por fin va a poder estudiar in situ una de las eras más apasionantes de la historia humana: la Edad Media.
Sin embargo, una crisis que vincula pasado y presente altera sus planes. Debido a un error en los cálculos del viaje, Kivrin queda atrapada en una de las epocas más mortíferas del medievo, al tiempo que una epidemia particularmente virulenta se extiende por la Inglaterra de mediados del siglo XXI, lo que imposibilita rescatarla…
Todo arranca de un recuerdo: una soleada mañana de mayo de 1992, en un pequeño apartamento de Berlín donde reinan los libros, las solicitudes de prestaciones sociales, las fotos en blanco y negro que empieza a hacer y un primer ordenador. Julia, universitaria, recibe una llamada de Stephan, el chico con el que sale, urgiéndola a verse. A partir de ahí, Julia viaja adelante y atrás en el tiempo, para narrar no solo su vida sino la de las generaciones que la precedieron, en particular la de las matriarcas de la familia. Como la de su madre, una actriz de carácter inestable que llevó a sus hijas (entre ellas, Julia y su hermana gemela) desde el Berlín Oriental al Occidental, primero al centro de acogida de emergencia de Marienfelde y después a Schleswig-Holstein; pero a los trece años Julia dejó la caótica granja en la que vivían y se trasladó sola a Berlín. Gracias a ayudas sociales y a las casas en las que limpia, puede ir al instituto. Entretanto, conoce a su padre e inmediatamente lo pierde; para entonces, Julia ya sabe que ha crecido en una familia extraña, y que ella misma es tan extraña como los mundos que la rodean. Entre otros, el mundo de Stephan, su gran amor. Ese Stephan que llama ahora con apremio.