En un remoto asilo en el desierto, un hombre joven acompaña a un moribundo. Han pasado diez años desde que coincidieran brevemente en una institución psiquiátrica. Ahora, el que está punto de morir le pide al otro que termine el proyecto al que ha dedicado su vida: la reconstrucción de la singular historia de Jan Gay. Esta investigadora, escritora y activista queer de principios del siglo XX dedicó su vida a documentar las vidas lesbianas y la cultura nudista en Estados Unidos y Europa, y sin embargo su trabajo fue el origen de un manual sobre la homosexualidad como perversión titulado Desviaciones sexuales: un estudio de los patrones homosexuales.
La lectura de las misteriosas páginas tachadas de dicho manual infame acompañará las vigilias diurnas que siguen a las calurosas noches de insomnio de aquellos dos hombres. En las horas de oscuridad mantendrán una larga conversación sobre sus vidas y las de Jan Gay y los sujetos que participaron en la truncada investigación.
En este atmosférico relato de amor, que es a la vez un collage documental y un homenaje a Pedro Páramo y El beso de la mujer araña, Justin Torres desentierra un episodio borrado de la historia estadounidense para explorar los orígenes de la patologización de la comunidad queer; una bella e imaginativa novela que ha sido merecedora del National Book Award.
1917. En un campo de batalla cerca del río Escaut, John yace sin poder moverse ni sentir las piernas tras una explosión. Luchando por concentrar sus pensamientos, se pierde en la memoria mientras cae la nieve.
En 1920 John ha regresado de la guerra a North Yorkshire. Está vivo, pero no entero. Vive con Helena y reabre su negocio de fotografía, intenta seguir viviendo, pero el pasado irrumpe insistentemente en el presente, cuando los fantasmas empiezan a aparecer en sus fotografías.
Así comienza una narración que abarca cuatro generaciones de conexiones que se encienden y reencienden a medida que avanza el siglo y a veces, en momentos radiantes de deseo y trascendencia, unas chispas vuelan hacia arriba, obrando sus transformaciones décadas después.
La vida de las abejas, «un mundo aéreo, optimista y exterior», es estudiada por el poeta con ciencia y paciencia de entomólogo y con exactitud e ingenio, el escritor observa la vida dentro y fuera de la colmena, y estudia sus querencias, observa sus caminos y tiene en cuenta sus misterios. La vida de ese reino del enjambre está siempre presidida por una reina que Maeterlinck estudia con respeto y cortesía: sus costumbres, su trato a las abejas, su custodia fiel por obreras y soldados, su lujo, sus preeminencias tiránicas, sus vuelos nupciales y hasta su muerte están descritos con meticulosidad y criterio singulares. Nos muestra secretos sorprendentes de ese mundo regulado y perfecto, y logra que la lectura sea dramática y hasta dantesca, al mismo tiempo que comprensible. La vida de estas «criaturas casi humanas poseídas por el sentimiento del deber» nos es mostrada en toda su complejidad a través del mágico filtro de este libro prodigioso.
La joven psicóloga Lis de la Serna regresa a su Cantabria natal para ocupar el puesto de jefa del área de salud mental en la residencia Santa Teresa. Regentada por la congregación de las Carmentalias y ubicada entre los acantilados de Comillas, Lis ya estuvo allí cuando el suicidio de su pareja la llevó a internarse en el centro. Pero, ahora que piensa que sus problemas han quedado atrás y que puede empezar de cero, no sospecha que el engaño, la traición y el asesinato acechan entre las paredes de la institución. Cuando descubre las extrañas circunstancias que rodean a una muerte que tuvo lugar allí, Lis se adentra en un mundo peligroso donde imperan el secreto, la dominación y el crimen. ¿Podrá enfrentarse a la verdad que esconde la residencia Santa Teresa y salir indemne?
En su primera novela, Paloma Rivas, psicóloga sanitaria y neuropsicóloga de profesión, ha construido un escalofriante thriller psicológico plagado de sorpresas que llevará a los lectores a explorar los rincones más oscuros de la mente.
Jennifer Clement creció en Ciudad de México en los años sesenta, a apenas una puerta de distancia de la casa de Frida Kahlo y Diego Rivera. Su infancia, bohemia y muy poco ortodoxa, le permitió convivir con artistas, poetas, comunistas y revolucionarios y, más adelante, experimentar su propio despertar creativo. En los años ochenta, decidió sustituir las revoluciones de Latinoamérica por la contracultura de Nueva York, y pronto se convirtió en un referente de su escena cultural, habitando los mismos espacios que Jean-Michel Basquiat, Keith Haring, Colette Lumiere y William Burroughs, y frecuentando locales tan legendarios como The Mudd Club, Danceteria y Studio 54. La autora de La viuda Basquiat regresa con un memoir literario que es a la vez la historia de dos peligrosas, y por ello importantes, ciudades: Ciudad de México y Nueva York, y un retrato de los artistas que trabajaron en, desde y a pesar de ellas.
La década de 1950 se acerca a su fin y en Santiago de Chile Aurora se dispone a asistir a su primer año en la facultad de Medicina. En el discurso inaugural, el rector exhorta al alumnado, concretamente a las dos únicas mujeres de todo el curso, a demostrar que merecen un sitio entre esos bancos. Luchando contra los prejuicios de sus profesores, que dudan de su valía, y de sus propios compañeros, que asumen que Aurora anda en busca de un buen partido, esta cirujana en ciernes se gana un puesto de honor en la facultad. Entre lecciones de anatomía, disecciones de corazones y experimentos poco ortodoxos, pronto su propio corazón empezará a latir de forma incontrolada y Aurora deberá tomar una decisión imposible con la que vivirá el resto de su vida.