En Barcelona, una prostituta que va entrando en la vejez entrena a su perro para llorar ante la tumba que ha escogido para sí misma. En Viena, una mujer se vale de su don de ver el futuro para convertirse en la adivina de una familia rica. En Ginebra, el conductor de una ambulancia y su esposa acogen al abandonado y aparentemente moribundo ex presidente de un país caribeño, solo para descubrir que sus ambiciones políticas siguen intactas. En estos doce relatos magistrales acerca de las vidas de latinoamericanos en Europa, García Márquez transmite la melancolía, tenacidad, pena y ambición que forma la experiencia del emigrante.
Floresta de Prosa y Verso fue publicada como serie cerrada coleccionable entre enero y junio de 1936 por un grupo de jóvenes estudiantes de la entonces innovadora Facultad de Filosofía y Letras de Madrid. Reunió en sus páginas la creación primeriza de un numeroso grupo de jóvenes escritores junto a la colaboración de maestros y autores consagrados que presidió cada uno de los números: Juan Ramón Jiménez en dos ocasiones, Azorín, Lorca, Aleixandre. El resultado fue un conjunto misceláneo y muy representativo de la diversidad y complejidad del panorama literario del momento. Revista de espíritu abierto e integrador, colaboraron en ella jóvenes republicanos, liberales y progresistas, junto a conservadores, monárquicos y falangistas de primera hora. Entre los que sobrevivieron y mantuvieron tras la guerra su actividad literaria, se hallan figuras destacadas del exilio, como Francisco Giner de los Ríos o Joaquín Díez-Canedo –que dirigieron en México a partir de 1945 la colección de poesía Nueva Floresta,
Titulada según una fórmula jurídica francesa, por la que una pena superior «absorbe y se funde con penas iguales e inferiores», esta novela narra, de forma dura y singular, la infancia y adolescencia del autor. Tras una crianza desgraciada, Julien Blanc se verá inmerso en una maquinaria infernal de instituciones de acogida y de castigo que lo dejarán irremediablemente marcado, tras sufrir humillaciones, abusos e injusticias. Sin embargo, aunque no duda en identificar a aquellos que no le ayudaron en el camino, el protagonista también admite sus errores, no cae en el victimismo y buscará siempre espacios fraternales de pureza y superación que le ayuden a seguir.
Marilyn Monroe era puro fuego, sexualidad a flor de piel, romances turbulentos, pero también era una mujer frágil, asustada y repleta de inseguridades que buscaba en otros -en el Ex Deportista, en el Dramaturgo o en el Presidente- ese amor que ella misma se negaba. Una artista superdotada cargada de conflictos, temores y pasiones desatadas; una niña que no dejó de huir hacia delante y que llegó a burlar a la propia muerte para convertirse en leyenda.
Los jóvenes héroes de esta novela intentan entender el mundo que los rodea: Anna y Omeir se encuentran en lados opuestos de las magníficas murallas de Constantinopla durante el asedio de la ciudad en 1453; el idealista Seymour está inmerso en un atentado contra una biblioteca en una pequeña ciudad de Idaho en la actualidad, y, en un futuro no muy lejano, Konstance viaja a bordo de una nave interestelar que se dirige a un nuevo planeta. Todos ellos son soñadores que encuentran fuerza y esperanza en la adversidad... y todos están unidos por un libro escrito en la antigua Grecia que narra un viaje excepcional.
En una tierra sin nombre ni tiempo, un hombre llama a la puerta del rey para pedirle un barco con que zarpar en busca de la isla desconocida. Las trabas burocráticas que le ponen, la dificultad para emprender el viaje, la procedencia de la tripulación, los pertrechos necesarios y hasta el sitio de la presunta isla serán el objeto de esta narración en apariencia sencilla, pero que va ganando hondura con cada página.