Haley afronta su primer año de universidad, lejos de casa y todo lo que conoce, con una duda que está dispuesta a resolver: si realmente el amor es algo más que lo vivido hasta el momento. Pronto creerá estar cerca de encontrar la respuesta cuando su camino se cruce con el de un misterioso chico de ojos grises cuya mera presencia grita «problemas».
¿Merece la pena dejarse arrastrar por una atracción irresistible a pesar de que todos a su alrededor digan que es una mala idea? ¿Se puede luchar contra los demonios que persiguen al chico malo del campus o debería alejarse?
Al final, lo más difícil es determinar a qué corresponde de verdad la palabra «amor».
Cansado de vivir en un mundo en el que no encuentra su lugar, el millonario Andrew Blake decide dar un giro radical a su vida: deja su Londres natal y se marcha al campo en Francia… ¡A trabajar como mayordomo! Pero cuando llega a Beauvillier, nada sale como tenía previsto. Las relaciones entre los particulares habitantes de la mansión están llenas de malentendidos y situaciones absurdas, así que Andrew no tiene otra opción que intentar poner orden en esta caótica casa y hacerse amigo de Méphisto.
Una novela llena de charme, personajes inolvidables y humor, mucho humor.
Jean-Marie Gustave Le Clézio es uno de los novelistas franceses más celebrados y leídos en su país desde que, en 1963, ganara el renombrado Premio Renaudot con su primera novela, Le procès-verbal. Lo curioso es que, tras haber escrito más de treinta libros y haber sido traducido en el mundo entero, en nuestra lengua aún siga siendo prácticamente desconocido. Con la publicación de La cuarentena queremos remediar este incomprensible «descuido» y situar por fin a Le Clézio, también entre nosotros, en el lugar que merece.
Corre el año 1872 cuando en una taberna parisiense irrumpe desafiante el poeta Arthur Rimbaud y amenaza a la clientela. Diecinueve años después, Jacques Archambau, un joven médico que de niño asistió atónito a la tormentosa escena y que ignora cuán ligado se halla su destino al del célebre poeta, embarca en el Ava con su esposa Suzanne y su hermano Léon rumbo a la isla Mauricio, su tierra natal. Allí les espera el gran clan familiar que antaño expulsara al padre de Jacques y Léon. Sin embargo, tras declararse dos casos de cólera en el barco, los pasajeros -un puñado de europeos y multitud de indios contratados para la recolección de la caña de azúcar- se ven obligados a desembarcar en la isla Plate, frente a Mauricio, para pasar la cuarentena. Abandonados a su suerte, verán convertirse la paradisiaca isla en un infierno del que no saben si saldrán con vida. Frente a un Jacques perplejo y una Suzanne tal vez ya contagiada, Léon volverá los ojos hacia la isla, hacia la joven y bella india Suryavati. Hacia la vida.
Fue en un apartamento lúgubre de Vanves, durante su exilio francés, donde Tsvietáie-va escribió el presente texto, que relata el encuentro de la pequeña Marina con el dia-blo en la habitación de su hermana, don¬ de se refugiaba para leer libros prohibidos. Con una prosa burlona, ora exaltada, ora gélida, pero siempre hechizante, la poeta relata el despertar de su fascinación por las palabras, encarnadas en la figura del dia-blo, que su implacable mirada transforma en una criatura tan temible como seduc-tora. Una extraordinaria evocación lírica de la infancia y de la gestación de un genio literario irrepetible.
Sara estudia Bellas Artes, pero cada vez le parecen menos bellas. Fran estudia Derecho, como quiere su familia, pero ni su corazón ni su vida giran en torno a ello. Bárbara actualiza sus redes sociales de manera constante y a ratitos estudia Diseño.
Los tres amigos se conocieron años atrás en una fiesta de disfraces y se creó entre ellos una bonita amistad en la que, sin saberlo, se fueron ocultando cosas.
Pero la vida, los momentos y las sensaciones les hacen ver que algo falla, y comienzan a plantearse si…
¿Será todo tan idílico como se quieren hacer creer?
¿Conseguirán sincerarse?
Y, sobre todo, ¿qué pueden perder si se cuentan la verdad?
William Wooler es, a primera vista, un padre y marido entregado. Pero ha estado teniendo una aventura que esa misma tarde ha tenido un horrible final en un motel de las afueras. Cuando regresa a casa, destrozado y enfadado, se sorprende al ver que Avery, su hija de nueve años, ha salido antes de la escuela y pierde los estribos.
Horas más tarde, la familia de Avery comunica su desaparición.
De repente, Stanhope ya no parece un barrio tan apacible. Y William no es el único que esconde una mentira. A medida que los testigos aportan información, que puede o no ser cierta, sobre la desaparición, los vecinos de Avery se muestran cada vez más desquiciados.
¿Quién se ha llevado a Avery Wooler?