Mi nombre es Poppy St. James y acabo de conseguir el trabajo de mis sueños como Directora de Relaciones Públicas de los Jacksonville Rays, el equipo más popular de la NHL. Pero, si quiero quedarme, tendré que demostrar que lo merezco. Llevo esta profesión en la sangre, pero controlar a los jugadores de hockey es un verdadero desafío, especialmente al defensa Lukas Novikov.
No me importa lo bien que juegue Lukas al hockey. Fuera del hielo, siempre está encontrando formas de meter a sus compañeros en problemas, especialmente a Colton Morrow, y luego me toca a mí ingeniármelas para sacarlos de ellos. Pueden llamarme PR Barbie todo lo que quieran, pero solo estoy haciendo mi trabajo...
Steve, un policía retirado, disfruta de su tranquila jubilación: las noches de trivia en el pub, su banco favorito en el parque y su gato esperándole en casa. De vez en cuando acepta algún pequeño trabajo de investigación, pero sus días de grandes aventuras han quedado atrás. Ahora, la acción es cosa de su nuera, Amy...o eso cree él.
Para Amy, la adrenalina es parte esencial de la vida. En su trabajo en seguridad privada, cada día trae nuevos riesgos. Actualmente está en una isla remota protegiendo a Rosie D’Antonio, una autora superventas, hasta que un cadáver y una bolsa de dinero convierten el paraíso en una pesadilla. Sin más opciones, lanza un SOS al único en quien confía: su suegro Steve.
Jihye es una chica corriente, nunca ha sido extraordinaria. De carácter más bien apocado, en la Academia donde trabaja como administrativa tolera en silencio la política de sus jefes y los absurdos de la burocracia coreana. Siempre a un solo correo electrónico de la catástrofe profesional, se convierte en una maestra de las miradas silenciosas y de la táctica del café, pero todos sus esfuerzos por soportar a sus superiores y el ambiente de trabajo más o menos hostil que estos generan se ven alterados cuando llega Gyuok Lee, el nuevo becario.
Como si se tratara de una versión pacifista del protagonista de V de Vendetta, Gyuok recluta a un trío de aliados en la oficina para llevar a cabo algunas pequeñas venganzas. Juntos, estos cuatro «rebeldes» protestan contra los más poderosos con pintadas, lanzamientos de huevos y denuncias anónimas. Sin embargo, a medida que sus ataques van aumentando de calibre, la alegría y la sensación de liberación iniciales irá dando paso a otros sentimientos. Jihye y los demás descubrirán la belleza de la amistad y el extraordinario poder de la unidad para hacer frente a los obstáculos.