Quizá estás decepcionada con la vida, con lo que creíste que iba a ser y no es. Puede que en tu interior haya un lugar vacío que toma más y más protagonismo y que te hace sentir cada vez más disociada.
Este libro puede transformar radicalmente tu vida, gracias a los cuatro grandes focos de incendios donde dejar caer tu cerilla:
Identidad. Quemarás la máscara y la falsa performance que tienes como mujer, para abrazar y conectar con tu esencia.
Poder. Dejarás el miedo a un lado para empezar a descubrir de lo que eres capaz cuando te das cuenta de que, en efecto, eres imparable.
Placer. Honrarás el acceso al éxtasis, a la energía sexual que hay en ti y de la cual no te han permitido gozar… hasta ahora.
Amor. Carbonizarás las dinámicas tóxicas y patrones que nos inducen en una espiral de relaciones dañinas que nos alejan de nuestra propia individualidad.
Mara Torres ha escrito un libro lleno de cariño y delicadeza. Un gran homenaje a su hermana Alicia para tratar de entender las razones que la llevaron al suicidio, y una forma también de seguir demostrándole su amor, más allá del tiempo y la existencia. Este relato en primera persona se cruza con un texto de su hermana que encontraron entre sus pertenencias. Un diario en el que Alicia Torres iba desgranando su vida. El resultado es esclarecedor y emocionante, porque nos sumerge en los sentimientos de alguien que se aferraba a cualquier atisbo de felicidad para superar la existencia. En palabras de la autora: «Este no es un libro sobre mi familia ni sobre el suicidio. Es un libro sobre la mente de mi hermana pequeña y el proceso que la sumerge en la oscuridad total. Es la historia de alguien que deseaba vivir, pero no fue capaz de conseguirlo».
En pleno fragor de la batalla de Solferino, que en 1859 marcó para el Imperio austrohúngaro el comienzo de la pérdida de sus territorios italianos, el teniente Trotta salva inesperadamente la vida del emperador Francisco José. A partir de entonces el destino de la ennoblecida familia von Trotta -cuyos avatares narra esta novela- parece quedar irrevocablemente ligado al de la dinastía reinante y su declive, que correrá paralelo a lo largo de tres generaciones. Con una gran capacidad de evocación y una exquisita ironía no exenta de nostalgia, la novela nos transporta a un mundo en decadencia que se resiste a dejar de ser tanto como muchos se resisten a despedirse de él.