«Pero tú no eres mi hermana, nunca lo fuiste. No hemos jugado, comido, dormido juntas. Nunca te toqué, nunca te besé. No sé de qué color tienes los ojos. Nunca te he visto. No tienes cuerpo ni voz, solo eres una imagen plana en unas cuantas fotos en blanco y negro. No conservo ningún recuerdo de ti. Llevabas dos años y medio muerta cuando nací yo. Tú eres la criatura del cielo, la niñita invisible de la que nunca se habla, la ausente de todas las conversaciones. El secreto.» «La otra hija» es una larga carta que Annie Ernaux le escribe a Ginette, la hermana muerta a la que nunca conoció, pero cuya sombra siempre la acompaña desde aquel lejano domingo de agosto de 1950 en el que descubrió accidentalmente su existencia.
En algún lugar de Centroeuropa, en torno al 6.000 a.C, en plena transición al neolítico, Dira, una mujer cazadora, decide seguir su innata curiosidad y salir más allá de su poblado en busca de pruebas que demuestren aquello de lo que hablan distintas leyendas: que los mamuts están desapareciendo de la tierra. Su intención es ver el último ejemplar de esa majestuosa criatura solo comparable a una montaña en movimiento, aunque ello ponga en peligro su vida. Mongolia, siglo XXI, Khünbish, un paria aplastado por todo tipo de calamidades, es informado del negocio de los colmillos de mamut enterrados en el permafrost siberiano colindante al círculo polar ártico y decide agarrarse a esta última oportunidad para cambiar su suerte.
La parta blanda de la montaña narra el fascinante viaje sin retorno de dos personajes separados por siglos de historias y culturas, un periplo físico y espiritual que los llevará a transitar las fronteras entre lo vivo y lo inerte, entre lo que desaparece para siempre y lo que la tierra nos devuelve tras haber estado enterrado durante siglos.
La perra es una novela sobre el amor de las madres, la traición, la lealtad, la culpa y la soledad de las relaciones humanas.
En un pequeño pueblo del Pacífico donde confluyen la belleza y la violencia de la región y conviven, separados, la riqueza y la pobreza, los blancos y los negros, tiene lugar la historia de Damaris.
Damaris, una negra del Pacífico ya en la madurez, lleva muchos años viviendo con Rogelio. Su turbulenta relación ha estado marcada por la búsqueda infructuosa de un hijo: prueban de todo, y aun así Damaris no consigue quedarse embarazada. Perdida toda esperanza, Damaris encuentra una nueva ilusión cuando se le presenta la oportunidad de adoptar una perra. Esta nueva e intensa relación con el animal será para Damaris la experiencia que la obligará a reflexionar sobre el instinto y la maternidad.
¿Puede elegirse entre el deber impuesto y los designios del corazón?
Asturias, 1853. En el municipio de Castrillón, colindante a Avilés, el patriarca de una familia aristocrática local muere repentinamente y deja sin hogar a sus nietas, Sara y Nelia. La propiedad queda en manos de Iván Arango, uno de los propietarios de la floreciente mina de Arnao. Mientras que su tía Honoria y su prima Sofía las enredan en juegos casamenteros para asegurar su futuro, ellas tienen otras pretensiones. Esto las enfrentará directamente con una sociedad en transformación y tensará todavía más la relación entre Iván y Sara, divididos tanto por su clase social como por la disparidad de sus objetivos, pero unidos por una creciente atracción amorosa. Ellos serán sólo algunos de los afectados por una época de cambios donde la forma de vida tradicional choca frontalmente con los intereses de la nueva sociedad industrial.
La guerra ha acabado. Y una nueva guerra acaba de empezar. Tres veces a lo largo de su historia, Nikan ha luchado por su supervivencia en las sangrientas Guerras de la Amapola. Aunque la tercera acaba de terminar, Rin no puede olvidar la atrocidad que cometió para salvar a su pueblo. Ahora está tratando de librarse de su culpa, de su adicción al opio y de las órdenes asesinas del ardiente Fénix, el dios vengativo que ha bendecido a Rin con su temible poder. Aunque no quiere seguir viviendo, se niega a morir hasta vengarse de la Emperatriz, que traicionó a la que fue la tierra natal de Rin. Su única esperanza es unir fuerzas con el poderoso jefe militar del Dragón, que planea conquistar Nikan, derrocar a la Emperatriz y crear una nueva república. Pero ni la Emperatriz ni el jefe militar del Dragón son lo que parecen. Cuantas más atrocidades presencia Rin, más teme que su amor por Nikan la obligue a usar el apocalíptico poder del Fénix una vez más. Porque Rin está dispuesta a sacrificar lo que haga falta para salvar a su país… y para conseguir su venganza.