En los cuatro años transcurridos desde Manual de resistencia, Pedro Sánchez ha formado el primer Gobierno de coalición de la historia reciente de España, ha liderado el país durante una pandemia, una guerra en Ucrania y sus consecuencias económicas en toda Europa, y ha lidiado con otras muchas crisis, como la erupción de un volcán en La Palma.
Pese a todas las dificultades, en esta pasada legislatura se han sentado las bases de grandes transformaciones, con el medio ambiente, la lucha contra la desigualdad y la transición digital como ejes principales. Se trata de cambios que requieren maduración, coherencia en las políticas y constancia para consolidarse. En el futuro se abre un panorama complejo, con numerosas incertidumbres, en el que está en juego algo tan elemental como el avance o el retroceso de nuestro país.
Ante una derecha cada vez más escorada y más ruidosa, este libro —una crónica en primera persona que abarca hasta la noche electoral del 23 de julio de 2023— es una apelación, sin intermediarios, a la ciudadanía. Aborda la acción de Gobierno, pero también «lo que es posible lograr como nación en el futuro: pasar de la resistencia a esa tierra firme que España alcanzará cuando culminen todas las transformaciones ya en marcha».
Un manifiesto contra las narcotizantes rutinas que llevamos a cabo en la red como sinónimos de vida.
En las próximas décadas nos enfrentaremos a un mundo poscapitalista: una sociedad inmersa en el ininterrumpido consumo tecnológico; una tierra chamuscada, llena de plástico y pesticidas; una naturaleza devastada por el expolio de los recursos naturales.
En este ensayo tan pertinaz como demoledor, Jonathan Crary denuncia la manipulación a la que nos somete lo que él denomina el «complejo de internet», cuya presencia en todas las esferas de la vida hace que cualquier idea que contemple su marginación o ausencia resulte impensable. Pero, tal como argumenta Crary, la cultura y la economía tecnoconsumistas son intrínsecamente incompatibles con una tierra habitable y con la interdependencia necesaria para vivir de un modo más humano y menos alienante. Se trata de una obra que se alza en contra de la atomización social, característica de las redes y plataformas digitales, y reivindica la importancia de organizarnos colectivamente.
Es sabido que la Alemania nazi asesinó cerca de seis millones de judíos. Lo que no lo es tanto es que, junto al horror del Holocausto, los regímenes de Hitler y de Stalin asesinaron a otros ocho millones de civiles, la mayoría mujeres, niños y ancianos, solo en lo que Timothy Snyder denomina las «Tierras de Sangre».
Se suele identificar el horror del siglo xx con los campos de concentración. Sin embargo, la mayoría de las víctimas del nacionalsocialismo y del estalinismo nunca vio un campo de concentración ni de exterminio. Del mismo modo, los asesinatos en masa en Europa suelen asociarse con la muerte en cámaras de gas. Pero no fue el gas el método más empleado. Más de siete millones de civiles y prisioneros de guerra murieron porque se les negó la comida.
Por primera vez, el historiador Timothy Snyder describe en este libro la amplitud del horror que supuso el asesinato de catorce millones de ciudadanos europeos en solo doce años, los que van desde 1933 a 1945. El presente estudio implica aspectos militares, políticos, económicos, sociales, culturales e intelectuales, y se basa en la extensa documentación aparecida con la apertura de los archivos de la Europa oriental y los testimonios de las víctimas y de algunos verdugos.
Las Tierras de sangre no son un territorio político real o imaginario: son simplemente los lugares donde los regímenes políticos de Europa realizaron su obra más mortífera.