Cuando aún era un adolescente, Leonard Cohen se asomó un día al balcón de su casa en Montreal y oyó unos acordes de guitarra. El chico sentado en la hierba tocaba flamenco y durante unos días se convirtió en el primer maestro de Leonard. Desde entonces, paso a paso, Leonard Cohen fue forjando una carrera en la que los momentos estelares se alternaron con épocas oscuras, y en la que la música fue fiel aliada de la escritura. Canciones como «Suzane», «So Long, Marianne» o «Chelsea Hotel» nos acompañaron a lo largo del siglo XX y los poemas de Libro del anhelo resumen en pocas líneas emociones que no tienen fecha de caducidad.
Muchos veneran a ese hombre que en 2011 fue galardonado con el Premio Príncipe de Asturias y que, hasta el día de su muerte, el 7 de noviembre de 2016, siguió dando la vuelta al mundo para estar cerca de su público. Cuando alguien le tachaba de pesimista, Cohen sonreía y soltaba una de sus frases memorables, que constituyen una lección de vida.
Revisando estas palabras, entrevistando a la gente que le era próxima y reuniendo datos inéditos que el propio autor le proporcionó sobre su trayectoria personal y profesional, Sylvie Simmons reunió las piezas que componían al hombre y al artista y ahora, tras la muerte de Cohen, lo ha completado hasta lograr su mejor retrato.
Fernando de Lapi podría haber formado parte de la Generación del 27. Tan solo necesitaba un poco más de suerte, un poco más de osadía y, quizá un poco más de talento como poeta. Ahora, en el gris Madrid de la posguerra, se refugia en la seguridad de su cargo en el Banco de España y, sobre todo, en el amor de María Luisa, su esposa y confidente. Fernando tiene un apasionante pasado personal que contarle, con sus contactos con Unamuno, Jorge Guillén, Picasso, Gerardo Diego, García Lorca, Gómez de la Serna y un largo etcétera. Pero también, mientras desgrana sus memorias, se convierte en el excelente cronista de la historia de la España reciente, que va transcribiendo su mujer, mientras el matrimonio va entrando en una fase de intimidad.
La autobiografía apasionada, certera y llena de humor de una figura imprescindible del teatro, el cine y la televisión.
Tan lejos, tan cerca perfila con irresistible ironía la trayectoria profesional de una figura capital de la escena española en sus múltiples facetas de actor, guionista, dramaturgo y director, sin olvidar su labor como escritor y articulista ni sus múltiples e inolvidables trabajos televisivos durante los años setenta y ochenta del pasado siglo. Los ajetreos personales y sentimentales del autor, narrados sin ira ni complacencia, las glorias y sinsabores de la profesión, las ilusiones y frustraciones, la pasión por actuar, aparecen en estas páginas con el trasfondo de unos años —la posguerra, la dictadura, la Transición y los inicios de la democracia— cruciales para el país. Adolfo Marsillach se reveló en estas páginas como un soberbio memorialista y el libro mereció en 1998 el Premio Comillas de Historia, Biografía y Memorias.
Apasionada e impetuosa, la personalidad de Tina fue única. Nacida en Italia a finales del siglo XIX, y tras un breve paso por Hollywood, donde trabajó como actriz, llegó a México en plena efervescencia cultural de los años veinte.
Fue compañera en las reflexiones artísticas y políticas de los intelectuales y creadores de la época —Edward Weston, Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros o Frida Kahlo, sólo por citar algunos— y acá encontraría el coraje y la inspiración necesarios para descubrir en la fotografía el medio idóneo con el que mostrar su indignación y compromiso por las injusticias sociales.
Pero más fuertes que su carácter e incluso su obra fueron sus fervientes ideales anti-fascistas, que mantuvo firmes hasta su trágica muerte, cuya causa real sigue siendo un misterio.
Enrique Alberto Kogan nos lleva en un viaje íntimo y fascinante a través de las páginas de sus memorias en "Toda una vida loca". Con una sinceridad que desarma y un estilo narrativo audaz, Kogan revela sus triunfos y fracasos, secretos nunca contados, y las lecciones aprendidas en su camino.
Desde una infancia y juventud repleta de travesuras hasta sus aventuras como mochilero por el mundo, el autor narra cómo sus experiencias en distintas ciudades moldearon su carácter.
Nos habla de sus negocios, desde los primeros pasos hasta la creación de sus bien recibidas publicaciones, enfrentando enemigos en la cima del éxito y sobrellevando las duras pruebas del mercado hispano en los Estados Unidos. Con desfachatez y sin tapujos,
Enrique nos cuenta sobre sus amistades fieles y los traidores que lo rodearon. Nos invita a conocer a las mujeres que formaron parte de su vida, cada una dejando una huella (o no). "Toda una vida loca" es más que una autobiografía.
A través de sus páginas, Enrique Kogan nos enseña que la vida es un tobogán lleno de altas y bajas, y que lo importante es seguir adelante. Una lectura imprescindible para quienes buscan una historia de vida contada con sinceridad y el corazón en la mano.
En la noche del 27 al 28 de octubre de 1910, Tolstói, de ochenta y dos años, abandona a su esposa e hijos y parte de incógnito en un vagón de tren de segunda clase. Desafortunadamente una enfermedad obligará al gigante de las letras rusas a detenerse en la pequeña estación de Astapovo, un diminuto pueblo perdido en el inmenso imperio ruso que en pocas horas se convertirá en el centro del mundo. Bajo la atenta mirada de las fuerzas policiales (preocupadas de que la muerte del "amigo del pueblo" pueda ser un pretexto para el desorden) y la mirada "maternal" de la Iglesia ortodoxa (que no pierde la esperanza de ver regresar al gran excomulgado a ella), a Astapovo acudirán periodistas, fotógrafos y camarógrafos, así como amigos, discípulos y familiares de Tolstói. Durante seis días -seis días que mantienen al mundo en vilo- la prensa dará a conocer los más mínimos detalles de la historia: por primera vez un hecho privado pasa a convertirse en un acontecimiento público.