Publicado bajo el pseudónimo de Forez en 1943, en plena Ocupación, El cuaderno negro fue escrito durante el período en el que François Mauriac, condenado por Vichy casi al silencio, participaba en la prensa clandestina de la Resistencia. Desde su exilio interior en el señorío de Malagar, el escritor francés estigmatiza en sus páginas la actitud cínica, opresiva e inmoral del mariscal Pétain y de aquellos compatriotas que accedieron a colaborar con los nazis.
Una colección de reportajes, publicados previamente en la revista The New Yorker y compilados expresamente para Anagrama, que reúne personajes y paisajes políticos de España y Latinoamerica.
Por estas páginas desfilan el rey Juan Carlos en la España de los bandazos, Augusto Pinochet antes del juez Baltasar Garzón, un espectacular Hugo Chávez en una Venezuela de contrastes, el decrepito Fidel Castro en una Cuba sin salida satisfactoria para nadie, García Márquezde genial conspirador en el polvorín colombiano, los restos de Federico García Lorca en un tira y afloja entre lo político y lo sentimental y el paisaje de las favelas brasileñas, donde florece la extraña mística del delito.
Todos reconocen su obra. Nadie conoce al hombre.
Cristóbal Balenciaga no se dejaba ver en sus desfiles ni salía jamás a saludar tras finalizarlos. Si hacemos caso a la leyenda, el diseñador vasco seguía con detalle los pases a traves de un discreto agujero practicado en las cortinas de terciopelo que decoraban su maison. Apenas existen retratos suyos, e incluso llegó a calar el rumor de que el hombre invisible de la alta costura no era más que una invención, una estrategia comercial elaborada con astucia. De lo que no cabe duda es de que "el mejor diseñador de todos los tiempos" -según reconocieron Christian Dior o Coco Chanel- antepuso siempre el prestigio a la fama y fue artífice de una obra inmortal, casi tan grande como el misterio que aún hoy envuelve su biografía.
Su guitarra, decía su amigo Manolo Sanlúcar, «encanta al que no sabe y vuelve loco al que sabe». Su compleja personalidad le convirtió en un genio de la música admirado en todo el mundo, pero también en un hombre angustiado y lleno de dudas. ¿Qué hay tras la mirada enigmática del mejor músico flamenco de la historia?
Paco de Lucía aprendió a tocar la guitarra en su casa gracias a su padre, que elaboró un ambicioso plan al estilo del que Leopold Mozart llevó a cabo con su hijo. Pronto se convirtió en un virtuoso que superó a todos sus maestros e hizo su primera gira mundial con solo catorce años. Formó una pareja mítica con el cantaor Camarón de la Isla y expandió los límites del flamenco hacia lugares inimaginables. Ídolo a su pesar, en la furia de su toque está a la vez la búsqueda y la huida de sí mismo.
El hombre que lideró una rebelión de esclavos para crear una nación
En 1791, en plena efervescencia revolucionaria, los esclavos de la colonia francesa de Saint-Domingue —actual Haití— se rebelaron contra sus amos e iniciaron la primera y única rebelión de esclavos en la historia del mundo que triunfó y dio origen a una nueva nación. Bajo el carismático liderazgo de Toussaint Louverture, apodado el Espartaco Negro, el pueblo haitiano acabó conquistando su libertad. El Espartaco Negro narra la épica lucha de Toussaint Louverture por la independencia de Haití. Nacido en la esclavitud, la historia del poliédrico líder es una historia de superación frente a todas las circunstancias. Gracias a la vibrante narración del galardonado historiador Sudhir Hazareesingh, que incorpora fuentes inéditas y novedosas perspectivas, conoceremos de primera mano su formidable ascenso: su juventud como esclavo, su papel en el primer estallido revolucionario de 1791, su fugaz alianza con los españoles en la búsqueda de la libertad para los esclavos, su adhesión a las fuerzas y valores de la naciente República Francesa, su papel capital en la independencia de Haití y su fin en una prisión francesa. Mientras nos sumergimos en un maremágnum de acontecimientos, descubriremos a un hombre y un pueblo enfrentados a las fuerzas dominantes de su tiempo: la esclavitud, el imperialismo y el racismo. Esta es la historia de la Revolución haitiana, contada a partir de su principal protagonista.
Jim Morrison, líder de The Doors e icono de la contracultura, fue hallado muerto, con solo 27 años, en la bañera de un piso de París. Pocos saben que hasta llegar a ese trágico desenlace sufrió un brutal y absurdo acoso político, judicial, policial y mediático. Morrison, el primer cantante de rock detenido en un escenario y uno de los primeros en sufrir la cultura de la cancelación, fue empujado a un demencial juicio en Miami y se enfrentó a enemigos tan poderosos como el presidente Nixon; J. Edgar Hoover; los medios de comunicación; decenas de reaccionarios leguleyos y un juez conservador con aspiraciones políticas. Pero, tal vez, su peor enemigo fue él mismo.