Mortimer «Mo» Folchart y su hija de 12 años, Meggie, comparten su pasión por los libros y un don: si leen en voz alta, pueden hacer aparecer a los personajes del libro. Pero un peligro acecha: por cada personaje de ficción que llegue al mundo real desaparecerá una persona, que se irá al mundo de ficción... Hace tiempo Mo compró un ejemplar de un libro muy buscado. Es Corazón de Tinta, un libro repleto de ilustraciones y de extrañas y maléficas criaturas que, desde que su hija Meggie tenía tres años, conserva escondido. Fue entonces cuando, mientras lo leía en voz alta, su mujer desapareció en ese misterioso mundo de ficción. Capricornio, el villano de Corazón de Tinta, desea hacerse con ese ejemplar único para controlar el poder sobre la encarnación del mal: la Sombra. Para ello, secuestrará a nuestros héroes y los embarcará en un peligroso viaje...
Historia de las Tres Guerras, siglos VIII-XIV
Imperio de Yithia, año 1400 de la Era Solar. Cinco siglos después, la heredera al trono Ashbree Aldair posee un extraordinario don que podría destruir el corazón del Señor de las Sombras y acabar con el conflicto para siempre. Pero no es fácil que el futuro de toda tu raza dependa de ti y menos aún si tu padre se encarga de hacerte saber, cada vez que fracasas en tu cometido, que eres una vergüenza.
Emma es una chica aplicada que empieza el último año del instituto. Tiene una vida normal, amigos normales. Ella no se siente atraída por esa normalidad, quiere una aventura... algo especial, como las historias que lee.
Nunca se había detenido a pensar en el refrán que dice «cuidado con lo que deseas, puede que se vuelva realidad cuando menos lo esperas». Conocer a Owen es prueba de aquello.
Desde la llegada de aquel chico, todo se desmorona; Emma cae en lo profundo de una cascada de sentimientos que ni ella misma puede lograr comprender. Hechos sobrenaturales comienzan a rondarle, junto a millones de preguntas.
¿Qué hay en él que le atrae tanto? ¿Qué sabe Owen que ella no?
Su vida cambiará por completo.
Su destino se definirá.
Al día siguiente de mudarse de casa, Coraline explora las catorce puertas de su nuevo hogar. Trece se pueden abrir con normalidad, pero la decimocuarta está cerrada y tapiada. Cuando por fin consigue abrirla, Coraline se encuentra con un pasadizo secreto que la conduce a otra casa tan parecida a la suya que resulta escalofriante. Sin embargo, hay ciertas diferencias que llaman su atención: la comida es más rica, los juguetes son tan desconocidos como maravillosos y, sobre todo, hay otra/madre y otro padre que quieren que Coraline se quede con ellos, se convierta en su hija y no se marche nunca. Pronto Coraline se da cuenta de que, tras los espejos, hay otros niños que han caído en la trampa. Son como almas perdidas, y ahora ella es su única esperanza de salvación. Pero para rescatarlos tendrá también que recuperar a sus verdaderos padres, y cumplir así el desafío que le permitirá volver a su vida anterior.
NI LOS BUENOS SON TAN BUENOS, NI LOS MALOS SON TAN MALOS.
Dakota Monroe no es la chica mala ni la extraña de clase.
Entonces, ¿quién es? Respuesta fácil: Dakota es una universitaria en apuros que busca salvar a su hermana mayor del aprieto en el que se ha metido. Con una complicación, la única solución a todos sus problemas es aliarse con el popular, misterioso e inalcanzable Jagger Castleraigh.
Pero Jagger no es el chico malo que ella espera: odia las motos, es el mejor de su clase y trata a las chicas como princesas.
Entonces, y volviendo a la pregunta del principio, ¿quién diablos es Dakota Monroe?
Dakota es ni más ni menos que la chica que pasa de ayudar a su hermana a querer descifrar el enigma que es Jagger Castleraigh.
De repente, toda su historia con Jagger comienza a girar en torno a una palabra: "contradicciones"