Una novela íntima y sensible sobre la pérdida, el amor y los caminos que nos pueden ayudar a reencontrarnos con nosotros mismos.
Lolo ya no está, y es un dolor que Ana no logra poner en palabras. Como una forma de abrazarse, dibuja en su libreta y esboza poemas al ritmo de la música que suena en sus auriculares. Una fuerza desconocida la empuja hacia adelante, a pesar de todo. Pero los recuerdos la siguen despertando por las noches y durante el día se encuentra soñando con volver a ver esos ojos enormes. Hasta que una puerta se abre, y del otro lado el corazón de Ana vuelve a latir. Una novela íntima y sensible sobre la pérdida, el amor y los caminos que nos pueden ayudar a reencontrarnos con nosotros mismos.
Tres facciones marchan hacia New Prentisstown y hacia una guerra que puede destruir todo cuanto Todd y Viola conocen. Las consecuencias de cada acción, y de cada palabra, son incalculables. ¿Apoyarán a un tirano, o a un terrorista? ¿Es mejor salvar la vida de quien más quieres, o la de miles de extraños? ¿Es posible la redención, o hay que darla por perdida?
Y mientras el Ruido, incesante, descubre todos los pensamientos, la voluntad de unos amenaza con superar el deseo desesperado de otros.
Todd y Viola no tienen posibilidad de escapar. Y si la guerra convierte a los hombres en monstruos, ¿qué terribles decisiones les aguardan?