Prietica espera con ganas la llegada de su abuela Julia. La niña vive en Copey. Sobre una mata de jagua, observa el campo a su alrededor y sueña con conocer el mar. Ese día la abuela viene con preciosos regalos: sus increíbles narraciones de leyendas tainas y, algo inesperado, una cotorra a la que nombran Fufa. Pero Prietica está triste porque sus padres se van para Nueva York y,' para apenarla más, resulta que Fufa se escapa. Quizá entre las historias del pueblo taino y sus dioses, y el viaje que emprenden la niña y su abuela a lomo del caballo Azabache, que las lleva a lugares inesperados, ella vuelva a ser feliz. Una historia sobre los lazos de familia, la apacible vida en el campo y el legado de los primeros pobladores de Quisqueya.
Estos cuentos presentan las habilidades de los gatos y su relación con los humanos. Tocan el piano como Mozart, pintan como Pollock y viven como perros y gatos. Interrumpen los juegos de mesa y atraviesan el teclado de una computadora. Finalmente son la musa de un pintor y testigos de una amistad.