Una chica que huye. Una banda de mercenarios vikingos. Un romance prohibido. Y un secreto que les amenaza a todos. Silla Nordvig ha sobrevivido al Camino de Huesos.
Pero su sueño de una vida sencilla se ha esfumado. Herida, traicionada y traumatizada, Silla se ve obligada a huir y esconderse junto a Reynir, el implacable líder de la Banda de las Hachas Sangrientas, y a idear un nuevo plan: dominar la magia que corre por sus venas y salvar a su hermana. Pero, para conseguirlo, deberá enfrentarse a sus demonios internos.
Saga Volsik no tiene nada que perder. Han matado a su familia, le han robado el trono y quieren casarla con los usurpadores. Cuando descubre el secreto de su madre adoptiva, sus planes cambian drásticamente: ahora está decidida a desmontar los planes de la Reina Signe. ¿El único problema? El apuesto dignatario extranjero que sabe demasiado.
Mientras, el mundo de Iseldur empieza a cambiar, avivado por la magia que renace.
¿Conseguirán Silla y Saga encontrar la fuerza necesaria para cumplir sus destinos y parar el caos que acecha a su mundo?
Lady Zenobia “Zia” Osborn, a duke’s daughter, is frustrated that her entire life has been predetermined. What good is skill or intelligence if one is forced to suffocate it because of one’s sex? She’d much rather make her mark on the world than bat her eyelashes for the ton.
Zia only comes alive in the Lady Knights, a clandestine social club for rebellious girls. In it, she is free to compose music, fence, read controversial literature, and save orphans from destitution by any means necessary. Aside from her closest confidantes, no one knows about Zia’s indecorous other life.
Cada vez que entra en el ascensor, a Sofía le sube la temperatura. Y no es porque haya pillado un virus en el hospital en el que trabaja como residente, sino por el efecto que Marcos, con su sonrisa de medio lado, sus bíceps y sus hoyuelos, tiene sobre ella.
Y es que, para Marcos, desde que coincidió con aquella chica guapísima del uniforme al revés, subir en el ascensor se ha convertido en su pasatiempo favorito. Cuando comparte ese pequeño espacio con ella solo puede pensar en lo mucho que desea acercarse. Pero… ¿está dispuesto a volver abrir su corazón?
Una residente de medicina y un técnico en enfermería…
Los viajes en ascensor nunca habían sido tan apasionantes.