Una novela cargada de pasión, traiciones y conflictos religiosos que descubre al lector la Cataluña medieval.
Por encargo del conde de Besalú, el maestro de obras Prim Llombard debe construir un puente fortificado. Aunque los habitantes de la villa creen que se trata de una obra providencial, pronto el constructor sufre los sabotajes de una conspiración urdida para que otro señor se apodere del condado. Los traidores emplean todos los poderes a su alcance, naturales y sobrenaturales, para conseguir su objetivo. Confinada en la judería, la comunidad judía se convertirá en un apoyo inestimable para detener este ataque.