En un mundo de influencers de pacotilla y de princesas yo elegí ser una persona que se come el mundo antes de que el mundo me coma a mí, aunque a veces tenga náuseas.
Pero ¡cuidado! porque, sí, hablo de cosas de chicas y de chicos, de situaciones muy reales, de momentos alegres y de llanto, pero os lo digo alto y claro: todos y todas llevamos una Drama Queen dentro, solo hay que dejarla salir…