Hace unos cuatro mil años, una tribu del suroeste de Gran Bretaña llevó a cabo una de las mayores hazañas arquitectónicas de todos los tiempos: Stonehenge, un santuario construido a base de inmensos bloques de piedra traídos de tierras lejanas. La grandiosidad de la obra ha mantenido perplejos a los investigadores a lo largo de los siglos, hasta ahora, pues ¿qué llevó a aquellos hombres a acometer semejante empresa?, y ¿cuáles eran sus nombres, sus motivaciones o sus dioses?
El gran maestro de la novela histórica, Bernard Cornwell, toma a Stonehenge como principal protagonista de esta novela y da respuesta a esas y otras muchas preguntas. Es ésta la historia de las luchas de poder entre los tres hijos de Hengall, jefe de la tribu de Ratharryn: Lengar, el guerrero, Camaban, el visionario, y Saban, el constructor; estos tres hermanos, muy diferentes entre ellos, cada uno a su modo, osaron desafiar al mismísimo dios del Sol. Y el resultado es una novela magistral, un relato intenso y emocionante que nos descubre la oscura belleza de la cultura megalítica.